El prototipo ha sido creado por cinco estudiantes argentinos y ha suscitado el interés por adquirir la licencia de diferentes empresas de bebidas
Chill it, el microondas que enfría cervezas
Tener cerveza fría al instante. El sueño de cualquier cervecero está un poco más cerca gracias al trabajo de cinco estudiantes argentinos, que han desarrollado Chill it, la máquina que enfría la cerveza en 30 segundos.
La idea surgió hace cinco años en la universidad del Centro de Estudios Macroeconómicos de Argentina (CEMA), donde los estudiantes de Administración de Empresas Marcos Condomí, Nicolas Kolliker y Santiago Schmidt, presentaron el proyecto en un trabajo práctico sobre innovación, incluyendo el modelo de negocios. La acogida fue tan buen que fueron los propios profesores los que los instaron a desarrollar el diseño a través de su propia empresa.
Tras varios fracasos prácticos, el éxito en el método llegó con la incorporación al equipo de Luciano Cismondi y Pablo Di Lorenzo, estudiantes de ingeniería electrónica. Con ellos lograron transformar una idea que se perfilaba irrealizable en una máquina que actualmente funciona.
Aunque no se ha revelado la fórmula, se sabe que el aparato se enchufa como cualquier otro electrodoméstico, no lleva hielo y consume mucha menos energía que una nevera, logrando un 60% de ahorro energético.
Con Chill it la empresa busca plantear un cambio de paradigma. «Queremos convencer a las empresas que pueden tener todo su stock caliente y enfriarlo en 30 segundos mientras el cliente paga», explican desde la organización.
Hora de negociar
Los jóvenes se encuentran negociando con varias empresas de bebidas, que ya han mostrado su interés en adquirir la licencia. Su objetivo es conseguir que alguna firma tecnológica con capacidad industrial quiera producir estas máquinas a gran escala, lo que les permitiría recibir dividendos por cada patente, conservando en sus manos el capital tecnológico con la idea de ser sus propios fabricantes en el futuro.
Además del prototipo oficial han diseñado un modelo para el hogar, más pequeño, y otro portátil, para llevar en vehículos o food tracks.
Otros inventos similares
No es la primera vez que se desarrolla la idea del microondas que enfría. Otro invento similar fue el ‘frigondas’ V-Tex, que calentaba o enfriaba eligiendo una u otra función y que se presentó en 2017 en feria de tecnología IFA de Berlín.
Este proyecto, con participación española y perteneciente a la empresa británica Enviro Cool, también se comercializa en tres formatos según su uso, para centros comerciales o gasolineras, para hogar o establecimientos, y uno más pequeño para instalarlo en la puerta de la nevera.
Por su parte, la empresa californiana The Joseph Company, especializada en tecnología y alimentación, lanzó hace un par de años Chill-Can, la primera lata del mundo que se enfría sola.
La iniciativa ha logrado un reconocimiento especial de la NASA , y premios de la Agencia de Protección del Medio Ambiente o el ejército estadounidense, entre otros.
La lata está equipada con una tecnología que enfría automáticamente la bebida de su interior en un minuto aproximadamente, sin usar electricidad, energía o hielo, y ya se venden en las estanterías de supermercados como 7-Eleven.
El primer producto en adoptarlas fue la firma de café helado Fizzics Sparkling Cold Brew Coffee. Además en la web de la empresa aparecen bebidas como margaritas o cócteles de vodka.
Después de esto la pregunta es, ¿para cuándo en nuestras superficies comerciales a un precio asequible? Mientras, hielo y paciencia.