Miller High Life es la cerveza insignia de la compañía cervecera Miller Brewing Company, nacida en el año 1903. Es una American Lager fresca y fácil de beber que se mantiene fiel a su receta original de principios del siglo XX.
Miller High Life, una cerveza centenaria
La Miller High Life se elabora con una mezcla de maltas de cebada propios, lúpulos Galena provenientes del noroeste del Pacífico y levaduras propias de la marca también. Con respecto a su contenido alcohólico, se podría decir que tiene un nivel estándar, con 4,6% ABV. En cuanto al amargor de la Miller High Life se podría decir que es bastante bajo, con tan solo 7 IBU. Y para quienes les preocupan esas calorías de más, deciros que esta American Lager tiene 141 calorías por cada botella de 33cl ó 12oz.
El nacimiento del champán de las cervezas
A principios del siglo XX, en la primera década, los estadounidenses solían disfrutar de sus cervezas en un saloon o se las llevan en cubos a casa. Para facilitar el acceso a sus cervezas, Miller decidió crear una cerveza que sería embotellada. En tan solo tres años, en 1906, ya se ganó el apodo de «El champán de las cervezas embotelladas«.
Recordemos que esta cerveza nace en 1903, un año más tarde del estreno de El viaje a la Luna, de George Méliès, y probablemente de ahí surja (o no) la idea de «Girl on the Moon», la imagen publicitaria de Miller High Life. Ésta fue la primera marca registrada por Miller, en 1907, y acabó convirtiéndose en todo un icono de la compañía y de Estados Unidos. En el etiquetado de su botella actual podemos ver cómo aparece el sello de esta chica en la luna.
Una cerveza para todos
Su popularidad aumentó notablemente durante la Segunda Guerra Mundial, donde encontrar el champán de las cervezas era algo común. Los estadounidenses buscaban cervezas como ésta, ligeras y refrescantes, un tipo de cerveza para todos los públicos, que consumían tanto ejecutivos como obreros. Este siempre fue el deseo de Frederick Miller, fundador de la compañía, que su cerveza, como otras buenas cosas de la vida estén disponibles para todos.
Los maestros cerveceros trabajaron con los lúpulos Galena para que se adaptaran a las necesidades de Miller High Life, por la susceptibilidad de los aceites del lúpulo a la luz. Su receta no ha cambiado, sigue siendo la original de 1903.
